Si usted inhala un objeto extraño hacia la nariz, la boca o el tracto respiratorio, éste puede atorarse y causar problemas respiratorios. También puede llevar a que se presente inflamación e infección.
Si usted se traga un objeto extraño, éste puede atorarse a lo largo del tubo digestivo, lo cual puede llevar a infección o sangrado.
Ver también: asfixia
Obstrucción de las vías respiratorias; Vías respiratorias bloqueadas
Los niños de 1 a 3 años de edad son más propensos a tragarse o inhalar un objeto extraño, como una moneda, una canica, el borrador de un lápiz, botones, cuentas u otros elementos o alimentos pequeños.
Algunos alimentos (nueces, semillas o palomitas de maíz) al igual que objetos pequeños (botones y cuentas) pueden ser inhalados fácilmente por los niños pequeños y producir una obstrucción de las vías respiratorias parcial o total.
Las monedas, juguetes pequeños, canicas, alfileres, tornillos, piedras y cualquier objeto lo suficientemente pequeño como para que un bebé o un niño pequeño pueda llevárselo a la boca puede ser ingerido. Si el objeto pasa por el esófago hasta el estómago sin atorarse, es probable que atraviese todo el tubo digestivo.
Sin embargo, en algunos casos, sólo se presentan síntomas menores inicialmente y el objeto puede ser olvidado hasta que se presentan otros síntomas posteriores, como inflamación o infección.
EN CASOS DE INHALACIÓN DE UN OBJETO:
Cualquier niño que pueda haber inhalado un objeto debe ser evaluado por un médico. Los niños con problemas respiratorios obvios pueden tener una obstrucción total de las vías respiratorias que requiere atención médica de emergencia.
Si desaparecen la asfixia y la tos y el niño no presenta otros síntomas, se debe vigilar por si hay signos o síntomas de irritación o infección. Es posible que se necesiten radiografías.
Es igualmente posible que sea necesario realizar una broncoscopia para hacer un diagnóstico definitivo y extraer el objeto. Se pueden usar antibióticos y técnicas de terapia respiratoria si se presenta infección.
EN CASO DE INGESTIÓN DE UN OBJETO:
Se debe vigilar a cualquier niño que se crea que ha ingerido un objeto extraño para verificar si presenta dolor, fiebre, vómitos o sensibilidad localizada y se deben examinar las heces (deposiciones) para ver si el objeto salió del cuerpo. Algunas veces, esto puede causar sangrado rectal o anal.
Incluso los objetos puntiagudos (como alfileres y tornillos) generalmente atraviesan el tracto gastrointestinal sin complicaciones. Algunas veces, se necesitan radiografías, en especial si el niño presenta dolor o si el objeto no sale al cabo de 4 a 5 días.
NO "obligue a comer" a los bebés que estén llorando o respirando rápidamente.
Llame al médico o al número local de emergencias (como el 911 en los Estados Unidos) si piensa que un niño ha inhalado o se ha tragado un objeto extraño.
Thomas SH, White BA. Foreign bodies. In: Marx JA, Hockberger RS, Walls RM, et al, eds. Rosen’s Emergency Medicine: Concepts and Clinical Practice. 7th ed. Philadelphia, Pa: Mosby Elsevier; 2009:chap 57.